El desastre de Aznalcóllar es un desastre ecológico producido por un vertido de residuos tóxicos en el Parque nacional y natural de Doñana, en Andalucía, España, en 1998, causado por la rotura de la presa de la balsa de la mina de Aznalcóllar, propiedad de la empresa sueca Boliden AB. De ahí que también se conozca con el nombre de Caso Boliden.
Más de 9.000 kilómetros y 16 años separan el desastre de la mina sevillana de Aznalcóllar (abril de 1998) y el vertido al río Sonora desde la explotación mexicana Buenavista (agosto de 2014). Grupo México es el punto de unión entre estos dos accidentes medioambientales. Esta compañía es la propietaria de la mina de cobre Buenavista (la mayor explotación del país y la segunda de latinoamérica) y, a la vez, forma parte del grupo empresarial queganó el cuestionado concurso para reabrir Aznalcóllar. La explotación sevillana cerró tras el desastre causado por la rotura de una balsa de lodos tóxicos en los noventa. La Junta aspiraba ahora a reanudar los trabajos en la corta de Los Frailes, que la empresa sueca Boliden abandonó sin llegar a extraer casi 35 millones de toneladas de zinc, cobre, plomo y plata.
Pero la reapertura de esta mina sevillana ha sido paralizada por la Junta de Andalucía esta semana tras la investigación abierta por un juzgado sevillano, que aprecia irregularidades en el concurso público que ganó la unión entre Grupo México y Magtel. Desde que se adjudicó en febrero, las asociaciones ecologistas han denunciado los problemas de Grupo México en la gestión minera y han puesto el acento, especialmente, en el accidente de 2014 en la cuenca del rio Sonora, que ha obligado a esta compañía a pagar 115 millones de euros.

No hay comentarios:
Publicar un comentario